En la presentación del cuadernillo “Orientaciones para la entrega de
los proyectos académicos personales (PAP) para el ciclo escolar
2016-2017”, se menciona que “el docente es ante todo, un sujeto que reflexiona sobre su práctica cotidiana”.
Aquí encontramos un punto de coincidencia con la concepción de la
comunidad escolar de esta institución y con su modelo educativo, y
debido a que existe este reconocimiento por parte de la autoridad, es
importante que el siguiente paso sea reconocer el trabajo mismo de los
docentes, no sólo en el discurso sino en los hechos, al darle la
participación requerida para la construcción de un modelo de PAP
incluyente, que surja desde los docentes tutores investigadores (DTI’s)
en razón de la concepción de un modelo educativo que tiene como objetivo
principal formar estudiantes con una visión crítica, científica y
humanista. Tal objetivo sólo es posible si los DTI´s son parte de la
confección de estos planeas e informes, pues sólo así se fundamentarían
en la experiencia cotidiana de las aulas y responderían a las
condiciones reales de cada comunidad atendida. Ello permitirá encontrar
los parámetros que permitan, por un lado, la presentación de informes
que verdaderamente reflejen el quehacer docente desde los distintos
espacios donde se llevan a cabo sus actividades, y por el otro, hacer
del PAP un ejercicio de verdadera reflexión y crecimiento, y no sólo un
ejercicio estéril y sin sentido formativo, perfilado más como una
“rendición de cuentas” burocrático.
De aquí la importancia de que desde las academias se construya una
propuesta que parta de las condiciones en las cuales trabajan los
profesores y las limitantes de toda índole para el ejercicio de su labor
docente, tutoral e investigativa que existen en los planteles. Tal
propuesta debe ser presentada como una plataforma que permita que los
profesores mostrar su actividad, desempeño y trabajo con la población
estudiantil y la comunidad escolar sin estar sujeto a una estructura
ajena a su realidad que abra la puerta a análisis subjetivos y sin
ningún rigor metodológico sobre aspectos medulares de la vida
institucional -como son el índice de deserción real o el porcentaje de
egreso- que a su vez, puede incubar la tentación de señalar culpables y
sanciones sin un análisis adecuado de los contextos en los cuales se dan
los acontecimientos.
Cabe recordar que en el artículo 7 fracción VI del reglamento de la
Comisión Mixta de Capacitación y Formación Profesional del IEMS-DF
(CMCyFP) enuncia entre las funciones de esta comisión:
…trabajar en materia de capacitación y formación docente, en la
elaboración del Plan Anual de Trabajo Académico, que delimite los
lineamientos de los programas personales de los docentes en el rubro de
docencia, tutoría e investigación, que sea presentado al órgano del
Gobierno del Instituto para su aprobación.
Así mismo, en la fracción VII del mismo artículo se menciona la atribución de:
Dar seguimiento a los resultados del Plan de Trabajo Académico,
mediante propuestas y lineamientos de capacitación y formación
profesional, para que se brinde a los DTI acompañamiento que asegure su
profesionalización docente.
Ambos puntos demuestran que el PAP, en cuanto a su elaboración,
aplicación y análisis, no depende sólo de las autoridades
institucionales, sino que se implica la participación directa de los
DTI’s y de una comisión paritaria que garantice una verdadera
planificación de estos instrumentos formativos atendiendo a todas las
voces que confluyen en la vida académica del esta institución.
En seguimiento a este orden, es necesario que el PAP como cualquier
otro tipo de formato de planeación y presentación de informes, no sea
una entrega obtusa de resultados, sino un parámetro que permita
identificar las formas en que la labor de los DTI’s pueda ser apoyada
sólida y eficientemente, sin ánimos de fiscalización, sino atendiendo a
lo que nosotros mismos pregonamos como institución: dar un
“acompañamiento”, esta vez al docente, que le permita crecer en su
práctica profesional fundamentado en el proyecto del IEMS, entendiendo
que, si bien los estudiantes son el eje del modelo educativo, es claro
que no podemos soslayar que los docentes son parte esencial de la
consolidación de este proyecto.
En este sentido, resulta fundamental que las academias sean
revaloradas y posicionadas como uno de los ejes fundamentales para la
construcción de los “proyectos académicos personales” y cualquier otro
instrumento informativo de la práctica de los DTI’s, para que se
recupere efectivamente la experiencia desde estos primeros involucrados
en orquestar los trabajos en los distintos espacios académicos. Son los
DTI’s quienes deberán proponer y discutir cuáles son los rubros y formas
a seguir para la construcción de un PAP que reposicione la actividad
docente, la dignifique y la encamine a un crecimiento verdadero,
desmarcado de las tentaciones punitivas y estigmatizadoras que pretenden
exhibir a los docentes de este país como los “chivos expiatorios” de la
crisis educativa que vive nuestra sociedad.
DTI Héctor Jesús Díaz Jiménez
Secretario de Asuntos Académicos, SUTIEMS
Ciudad de México, octubre de 2016.
¡Por educación y trabajo dignos!