http://www.jornada.unam.mx/2013/05/15/correo
Indudablemente los maestros enfrentan un poder político con
capacidad de renovación de imagen y una televisión experta maquillista: la
reforma educativa surgió de un acto de prestidigitación del Pacto por México.
La reforma dejó fuera del artículo 123 constitucional, apartados A y B, los derechos laborales de los maestros; en el limbo, y ahora el Poder Judicial, amenaza dejar fuera sus amparos del artículo primero, de los derechos humanos. Se les niegan sus derechos laborales adquiridos.
La política neoliberal es la responsable de degradar la educación hasta la ignominia y el escarnio, negando el futuro de la niñez desde hace 31 años. En aras de favorecer, a esos mismos extremos, al gran capital, le entregó todos los bienes nacionales y, desde luego, el poder político.
¿Podrá mejorar la educación básica y la superior con el presupuesto tan castigado que el gobierno les dedica? ¿Podrá erradicar el hambre sin crear empleos estables y mejores salarios? Más de 90 por ciento de solicitudes de estudiantes a la UNAM son excluidas por el presupuesto.
Hoy, Día del Maestro, debemos apoyarlos en su lucha por dignificar al magisterio y más por reivindicar la educación científica, humana y popular, con presupuesto preferente, como debe ser la niñez y el futuro.
Por la ANAD, Enrique Larios, María Luisa Campos, Karla Michel, Manuel Fuentes, José Luis Contreras, Nahir Velasco, Oscar Alzaga y 32 firmas
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